Café de especialidad ¿qué es exactamente?

El café de especialidad es el centro de esta tercera generación (o tercera ola) del mundo barista pero ¿qué es exactamente? Se identifica como un café de alta calidad, eso lo tenemos todos claro, pero quizá no sepas que un café de especialidad es aquel que obtiene una calificación superior a 80 puntos (en una escala de 100) en una Cata realizada por 3 QGreader que se lleva a cabo simultáneamente en 3 sitios diferentes.

Café de especialidad: un proceso desde el origen

Los cafés de especialidad se distinguen por su sabor, su aroma y la ausencia de defectos. En Candelas sabemos que el proceso para obtener este tipo de productos es muy complejo y que abarca todas las fases de la producción: desde el origen, la recolección, el secado, el tueste y, por supuesto, la preparación.

El origen

El viaje de un grano de especialidad empieza en su origen. Los productores eligen una variedad concreta de de café para cultivarla en una región muy específica en la que se tienen en cuenta la temperatura, la sombra, la humedad, la altura y las plantaciones colindantes a los cafetos. Todos estos factores combinados dan como resultado una producción única.

Recolección

El proceso de recolección de un grano de especialidad también es importante a la hora de conseguir la mejor cualidad. Los cafés de especialidad se recogen siempre a mano y los caficultores se encargan de seleccionar las cerezas de café en su punto justo de maduración. De esta forma se evita que una cereza demasiado verde o demasiado madura aporte amargor al café.

Tras la recolecta, las cerezas pasan por una despulpadora que desecha la parte carnosa y se queda con el grano. Estos se dejan secar al sol para eliminar el exceso de humedad y se procede al descascarado. En este momento, se seleccionan manualmente los granos válidos y se desechan los que presentan defectos.

Tueste

Una vez que tenemos los granos verdes del café de especialidad llega el momento del tueste. Cada grano tiene un tueste ideal dependiendo de su origen y del uso que se vaya a hacer de él (un café espresso y uno de filtro piden diferentes tipos de tueste). Muchos baristas han empezado a tostar sus propios granos para adaptar perfectamente el grado de tueste a cada elaboración.

La preparación

Detrás de todo buen café de especialidad siempre hay un barista igual de especializado que sabe como prepararlo correctamente para que los clientes puedan disfrutar de toda la esencia de un café exclusivo. El método de elaboración es el último paso de una larga cadena pero no por ello es menos importante. Un café de especialidad en manos de un mal barista se puede convertir en toda una pesadilla. De igual modo, los buenos profesionales conseguirán que disfrutemos de todo un sueño en forma de taza de café.

¿Has probado algún café de especialidad? ¡Cuéntanos tu experiencia!