Entrevista al Doctor Martín, defensor de los beneficios del café

Descubre cómo el consumo diario de 4 tazas de café puede ayudar a tu salud

Asistimos en Santiago a la Conferencia “Consumo regular de café: Estilo de vida saludable”, impartida por el Doctor Félix Martín Santos, autor de numerosos artículos sobre estilo de vida saludable e incansable defensor de la dieta mediterránea y la actividad física.

Durante su intervención en el Hostal de los Reyes Católicos, el Doctor Martín explicó detalladamente los hallazgos científicos más recientes sobre las bondades del consumo regular de café, con una charla amena y un tono entusiasta. Basándose en relevantes estudios internacionales, el Doctor Martín sostiene que el consumo regular de café tiene innumerables efectos beneficiosos sobre la salud y aumenta nuestra esperanza de vida. Descubramos por qué.

-¿Cuál es la media que recomienda de consumo de café para que se mantengan sus beneficios saludables?¿Podríamos ponerle medida a ese “consumo regular” para mantener un equilibrio saludable?

- Si valoramos el buen perfil cardiovascular del café, en base a los estudios científicos más relevantes sobre el tema podríamos afirmar con cierta convicción que el consumo diario de 4 tazas de café muestra manifiestos beneficios, como la reducción significativa del riesgo de cardiopatía isquémica (18% en mujeres; un 13%  en varones), reducción del 23% de riesgo de infarto de miocardio, y reducción del 11% de riesgo de insuficiencia cardíaca.

Son bastantes los estudios epidemiológicos que revelan una relación dosis - respuesta: por cada taza diaria consumida, se observa una disminución del 7% del riesgo de diabetes, reducción del 22% del riesgo de cirrosis alcohólica, reducción del 7% del riesgo de cáncer de endometrio (4% si fuera de café descafeinado). También el gran efecto neuroprotector del café exhibe un efecto dosis-dependiente, especialmente en la prevención de la Enfermedad de Parkinson.

- Nos llama especialmente la atención su afirmación acerca de la relación del café con la hipertensión arterial. Según usted, el consumo de café no incrementa la tensión arterial. ¿Se recomienda en casos de consumidores hipertensos el café descafeinado, o es indiferente?

- Mi criterio está forjado en base a una revisión exhaustiva de los artículos científicos internacionales más relevantes sobre el tema. Así, en lo referente al café y el riesgo de hipertensión arterial me basaré en la extraordinaria revisión de Steffen M. Kuhkle y colegas publicada en 2012 en Journal of Hypertension, concluyendo que "No se observa un efecto estadísticamente significativo entre el consumo regular y mantenido de café y las cifras de presión arterial y el subsiguiente riesgo de hipertensión arterial”.

Basándose en este riguroso estudio, por primera vez en la guía de 2013 los responsables de la Guía Europea de Manejo de Hipertensión Arterial dejaron de prohibir el consumo regular de café a los pacientes hipertensos. En cuanto a aconsejar el café descafeinado en hipertensos, creo que, a tenor de los resultados observados, no parece necesario.

Casi todos los efectos saludables del café se observan tanto con café íntegro (con cafeína) como con café descafeinado, excepto los relevantes efectos neurológicos (reducción inequívoca del riesgo de Parkinson, muy probable reducción del riesgo de Alzheimer y de depresión mental), que requieren forzosamente cafeína, por su efecto como antagonista de  los receptores de adenosina A2, entre otros. 

- Finalmente, nos encontramos ante una pregunta obligada: Doctor Martín… ¿es usted un gran cafetero? ¿Cómo lo toma? ¿Alguna predilección?

- Confesaré  que antaño no me gustaba el café, sin embargo cuando tuve la oportunidad de probar un café preparado y servido por un barista cambió radicalmente mi concepto del café, pues el gusto amargo se tornó agradable, con aromas y sabores exquisitos: a frutos del bosque, canela, aceitunas, frutos secos... Ya nunca más volví a echarle azúcar, pues no era preciso. 

Preparo todos los días cafés en infusión, al principio, como medio litro al día (30 gramos de café recién molido, en grano de grosor medio, en medio litro de agua caliente 92 grados) y, desde hace 6 meses de 1 a 2 litros, dado el voraz apetito cafetero de mi querida cónyuge. Además, cuando acudo a alguna cafetería de auténticos baristas suelo tomar un par de ristrettos y un macchiato o cortado.

Recomiendo cafés arábicas, sin mezcla de torrefacto, sin mezcla de tueste con azúcar, pues sólo ofrecen sabores amargos. La saludable industria cafetera española posee notables arábicas comerciales y, además, paulatinamente están adquiriendo cafés de origen y finca conocidos, con características de cafés especiales de exquisitos sabores.

Tras escuchar al Doctor Martín, nos queda claro que además de aportar sabor e inspiración, el consumo regular de café contribuye a mejorar nuestro bienestar. ¿A quién no le han entrado ganas de un buen café? ¡A vuestra salud!